*Aunque tú me has echado en el abandono».
«Aunque tú me has dejado en el abandono
Aunque tú has muerto todas mis ilusiones
En vez de maldecirte con justo encono
en mis sueños te colmo de bendiciones.
Sufro la inmensa pena de tu extravío
siento el dolor profundo de tu falsía
y lloro sin que sepas que el llanto mío
tiene lágrimas negras
como mi vida.» Lágrimas negras». Diego El Cigala y Bebo Valdés
Haciendo malabares con dos palabras, soledad y abandono.
Desde que recuerdo, la soledad y el abandono han formado parte de mi vida, y con el paso de los años de la historia de mis pacientes. A modo de una invitada perenne, que no buscas, pero que aún así ha conseguido instalarse y organizar el hogar.
Resulta curioso que soledad sea un sustantivo femenino, la soledad. Hace referencia a la carencia de compañía, tristeza o melancolía que sentimos por la ausencia de alguna persona o cosa.
La Terapia Gestalt nos indica que los sustantivos son como fotografías, imágenes fijas pertenecientes a experiencias que hoy, podrían no ser novedosas y por tanto dejar de ser nutritivas para nuestro crecimiento.
Hablar, a cerca de la soledad, podría ser, como hablar a propósito de lo conocido.
El abandono es el sentimiento de ausencia o abandono, sufrida por un individuo.
El abandono hace referencia a una acción . Nos remite a un verbo, y con él, al movimiento, la acción. Dejar, entregar, descuidar, dejadez, dejar de luchar, darse por vencido, dejar de cuidar, perder, dejar solo a o a alguien.
La soledad, como sustantivo, es una definición estática de carencia, de falta acompañada de pesar y melancolía. Mientras que el abandono, como verbo, nos recuerda a una película a un proceso en curso, en movimiento.
La Terapia Gestalt, como terapia del verbo más que del sustantivo, nos invita a pasar de: «la soledad me pesa» a «me abandonaste cuando aún era una niña y necesitaba de ti». La primera parece algo individual, la segunda implica directamente a un/una otr@.
No es la soledad, es que alguien en algún momento me abandonó sin tener-me en cuenta.
«El objetivo de la terapia consiste entonces en sobreponerse a la soledad, restaurar la autoestima y conseguir una comunicación sintaxica» PHG, 115
Equipo PiN
Imagen: Eva Juan Fotógrafa