La estética de la muerte.
Amanece que no es poco
«¡Se me está muriendo divinamente, te lo juro! De los años que llevo de médico nunca había visto a nadie morirse tan bien como se está muriendo tu padre. Qué irse, qué apagarse, con qué parsimonia. Estoy disfrutando que no te lo puedes ni imaginar». José Luis Cuerda
He escuchado a lo largo de los años decir «nunca es un buen momento para morirse». Mi profesión me llevo a realizar talleres a cerca «del buen morir», «acompañar procesos de duelo «; a trabajar con enfermos de
ELA con la muerte siempre pegada a los talones.
Y hoy que soy yo la enferma y la muerte, me sopla al oído con demasiada frecuencia, que hacemos para morir con esa gracia que Cuerda nos contaba.
Igual me revuelco en la decrepitud que tomamos caviar
Me atragantan los mocos que saboreo un gran reserva
El proceso de morirse conjugado en plural, acompañada, esa es la «Gracia».
«Es importante mantener las falsas ilusiones por el bien del orden «. Retazos de lecturas Imagen
Imágen de María Inarejos