La gastronomía desde hace mucho tiempo ocupa un lugar importante en mi vida, no porque me guste cocinar, sino porque me gusta ir a lugares donde dejarme sorprender por la creatividad y el ingenio de los cocineros y cocineras.
Y ayer nos perdimos en un lugar donde; desde la entrada con sus jardines, la mantelería almidonada, una flor diferente en una pequeña bola de piedra adornando la mesa, unos cubiertos clásicos pero con el toque de modernidad; de pronto al sentarte y abrir la carta llena de color e imágenes una frase de Oscar Wilde «Amarse a sí mismo es el comienzo de una aventura que dura toda la vida». Todo esto no hacía más que aumentar el deseo y las ganas de disfrutar de un menú especial.
La cocinera nos deleito con una serie de pequeñas muestras de artesanía culinaria, quesos con texturas diferentes, pastas, pescado, carnes, arroces, todo en una justa medida para ser paladeadas y disfrutadas. Cada obra colocada en un plato que realzaba y acompañaba a la perfección la presentación.
Cuando querais perderos en un lugar donde ser sorprendidos por la creatividad y el buen hacer en el campo de Elche lo podeis encontrar.